Cada país tiene su norma con respecto a los nacimientos de los bebés. Por ejemplo en Latinoamérica se estila mucho la aplicación de cesárea, mientras que en Europa y Estados Unidos lo común, normal y natural es el parto, y la cesárea sólo la usan en casos extremos de emergencia. Sin embargo, algunos médicos prefieren la primera, por cuestión de organización, pero lo correcto es que seas tú quien decida el nacimiento de tu bebé.

Lo primero que debes saber es que las mujeres fueron hechas para dar a luz, es decir, todo el cuerpo e incluso el bebé te informarán y ayudarán a prepararte para ese gran día. Solamente tienes que tener paciencia, fuerza, determinación y quizá una ayuda medicinal, que en este caso es la epidural (sólo cuando hay mucho dolor).

 Conoce ambos procedimientos

Cuando una mujer se convierte en mamá, a veces lo primero que preguntan es que si fue por parto natural o cesárea, y muchas de las que optaron por lo segundo, se sienten avergonzadas de decirlo, porque la sociedad juzga a quién lo escogió de esa forma, sin saber que dicha intervención mucha veces es delicada, y la recuperación es dolorosa.

Pero vamos a explicarte cómo funciona cada uno, para que si te toca alguno, sea por selección o emergencia, no te agarre desprevenida.

Parto natural

Existen muchas formas de dar a luz natural.

  • Parto en hospital o clínica: una enfermera o médico, cada cierto tiempo y luego de haber roto fuente, te irá haciendo el tacto (prueba que se realiza para saber la dilatación del cuello del útero y la posición y descenso de la cabeza del bebé), y cuando llegue a nueve ya estarás lista para empezar a pujar. En este caso si sientes mucho dolor, puedes pedir la anestesia epidural (te duermen de la cintura para abajo), y así no sientes tanta molestia durante el trabajo de parto
  • Parto al agua: también llamado parto humanizado. La embarazada debe entrar a la piscina o bañera, cuando tenga cinco o seis centímetros de dilatación, y no puede estar más de 90 minutos en el agua, cuya temperatura debe estar en 37 grados centígrados. En cuanto a la profundidad, se recomienda que esté sumergida hasta el pecho. Y para chequear cómo va el bebé, la matrona hace una monitorización en ventana o intermitente, con un monitor telemétrico cada 40 o 20 minutos, y al pujar cada cinco, o después de una contracción
  • Parto instrumental: se hace en una clínica u hospital, igual que el procedimiento mencionado, solamente que al momento de la expulsión se usa un instrumento como fórceps, espátula o ventosa. Esto sólo se hace cuando se extiende el parto, o el bebé viene en una forma complicada de salir naturalmente

Ventajas y desventajas del parto natural

Ventajas
  • No requiere intervención quirúrgica
  • Su recuperación es mucho más rápida y menos dolorosa
  • No tienes límites para la cantidad de hijos que desees tener
  • Menos pérdida de sangre
  • Mayor oxigenación para el bebé
  • Se libera oxitocina que ayuda a la producción de leche materna
Desventajas
  • No puedes planificar el parto natural
  • Puede haber desgarre. Entonces puede que te realicen una episiotomía (incisión para evitar el desgarro de los tejidos)

Cesárea

La cesárea es una intervención que se realiza en un quirófano y con anestesia epidural (introducción de anestésico local en el espacio epidural). El procedimiento, que dura una hora, consiste en hacer una incisión quirúrgica horizontal en el abdomen de la madre, para sacar al bebé.

¿Por qué se realiza?

Pese a que esta intervención tiene sus fuertes y válidas razones, hay mujeres que lo hacen por selección, o temor de un parto natural. No obstante, aquí algunas de las causas que amerita una cesárea:

  • Pelvis anormal o estrecha
  • Malformaciones uterinas
  • Posición fetal anormal
  • Preeclampsia
  • Nacimiento múltiple
  • Parto natural e instrumental fallido
  • Bebé muy grande
  • Placenta previa o placenta baja
  • Pelvis contraída
  • Cesárea previa (no aplica en todos los casos)

Ventajas y desventajas de la cesárea

Ventajas
  • Puedes programar la fecha de tu preferencia
  • Menos dolor durante la intervención
Desventajas
  • Recuperación más lenta
  • Dificultad para caminar o sentarse los primeros días
  • Náuseas por la anestesia

Ahora que sabes un poco de ambos procedimientos, sigue tu instinto y decide lo mejor para ti y tu bebé.